Como pasa cuando algo se populariza en exceso, la diferencia entre lo que era y lo que es, muchas veces, es la calidad. Ahora, son las campañas de rebajas masivas como Black Friday las que empiezan a resentirse de cierto desgaste después de años de “abusos”.
¿Cuál es el problema de las campañas de rebajas?
EL mayor problema es que las empresas se suben al carro sin tener nada real que aportar, además, hay un exceso de ofertas poco claras y un aluvión publicitario que, en el mejor de los casos, es agotador.
Por eso, los consumidores perciben una sensación general de oportunismo, cuando no engaño, dada la cantidad de ofertas y al trabajo de criba al que ya les obliga la propia campaña.
A todo esto hay que añadir, por otra parte, la falta de capacidad logística, stock e incluso atención al cliente de muchas de estas empresas, cuya falta de preparación les llega a suponer un paso atrás en su desarrollo de marca dentro del mercado.
Este tipo de campañas de rebajas desaforadas eran desconocidas en España hasta hace algunos años, por lo que su importación directa de un país tan perfectamente engrasado para el consumismo como EEUU, las ha convertido en toda una prueba de valor para todo el tejido empresarial de nuestro país.
¿Qué falla con las rebajas masivas?
Tal vez el problema sea el propio modelo de rebajas en sí mismo; un estándar basado en generar interés, ansiedad y expectativa en el potencial cliente unas semanas antes de comenzar la campaña.
Este patrón basado en la urgencia (existencias limitadas), la oferta (bajada de precio), la temporalidad (solo durante la campaña) y la oportunidad (dura apenas unos días), termina por ser tan primario que los consumidores han llegado a sentir cierto desprecio por él.
De hecho, muchas marcas rechazan entrar en Black Friday para evitar la animosidad de sus clientes fieles o de los potenciales debido a lo complejo que se ha vuelto cumplir con las expectativas de un consumidor cada vez más exigente y harto de los embrollos típicos del marketing más conservador.
¿Cómo conseguir mejores rebajas?
Las nuevas reglas del marketing digital dirigen los esfuerzos de las empresas a lo emocional, tratando de dejar de hacer tan patente la ansiedad de las empresas por darle un sentido al viejo aforismo “toma el dinero y corre”.
Por eso, y del mismo modo que los clientes ya no buscan solo un lugar donde comprar un comprar un producto sin más, las empresas están obligadas a ser coherentes, sostenibles, apelar al consumo responsable y, sobre todo, a poner el foco en la experiencia de sus usuarios.
Quiero decir con esto que los negocios no se pueden ganar el pan en un par de campañas de descuentos anuales; aunque hoy en día Black Friday, Cibermonday, Navidad y las Rebajas de Enero supongan una lucrativa fuente de ingresos. Ahora, las marcas han pasado a formar parte del aparato emocional de las personas, y, por eso, cada vez se les exige mayor conciencia.
¿Quiere decir esto que las campañas extremadamente consumistas como Black Friday tengan los días contados? Pues seguramente no; pero sí estamos seguros de que en los próximos años todo va a ser muy diferente.
Desde 3dids.com asesoramos a nuestros clientes sobre la mejor forma de enfocar sus campañas publicitarias en favor de un desarrollo de marca duradero que no se base en el oportunismo y trabaje la fidelidad de los clientes.